La magia es un arte que permite a los niños abrir las puertas de un mundo de ilusión y de misterio, en el que pueden fantasear, imaginar y maravillarse con las pequeñas cosas.
Además de ser una gran oportunidad para divertirse, la magia posibilita las capacidades creativas y comprensivas del niño, que impresionado por el espectáculo que no entiende y siguiendo su instinto racional, intenta descubrir y entender los secretos del truco para poder hacer magia.
Hoy os proponemos una manualidad muy especial que os permitirá crear arte mágico.
Materiales que necesito
– Hojas blancas o cartulinas blancas
– Una cera blanca o una vela blanca
– Témpera diluida o cualquier pintura de agua
– Pincel
– Cartulinas
– Cola blanca o cola de barra
Cómo hacer cuadros mágicos
1. Haz un dibujo con una cera blanca o una vela blanca sobre una hoja o una cartulina blanca. Aunque no se dibuje nada, no te preocupes, ¡es la gracia del truco! 😉
2. Pinta toda la cartulina o la hoja blanca por encima con la pintura de agua que hayas escogido. La pintura resbalará en los lugares donde se haya pintado con la vela o la cera y, gracias a este efecto, aparecerá tu dibujo como por arte de magia.
3. Si quieres darle un toque más profesional a tu obra, puedes recortar sobre cartulina un marco cuadrado y pegarlo con cola de barra o cola blanca sobre tu cuadro mágico.
Ahora ya puedes prepararte para colgar tu obra de arte mágica, pero siempre sin olvidar que un buen mago nunca revela sus trucos.