El camión contará con un tanque de 420 litros de H2 que se reabastecerá, etapa a etapa, mediante una hidrogenera móvil.
Jordi Juvanteny, piloto del equipo: “El Dakar nos ha dado mucho y llega la hora de devolvérselo. Nuestro equipo pretende hacer cosas grandes e innovadoras, y la apuesta por el hidrógeno también será la forma de aportar nuestro granito de arena”.
Entre el barcelonés Juvanteny, el jienense José Luis Criado y el andorrano Jordi Ballbé sumarán 65 participaciones, todo un récord. Juntos tratarán de superar el 20º puesto de la última edición, en la que se convirtieron en el primer equipo español de la clasificación de camiones.
El camión del equipo KH-7 Epsilon Team será el primer vehículo en competir alimentado parcialmente por hidrógeno en el Dakar, una propuesta desarrollada junto a la compañía especialista EVARM. El MAN 6×6 que tripularán, entre los próximos 31 de diciembre y 15 de enero, Jordi Juvanteny (piloto), José Luís Criado (copiloto) y Jordi Ballbé (navegante), se ha presentado en el puerto de Barcelona poco antes de partir hacia Marsella, donde hoy pasará las verificaciones técnicas antes de embarcarse camino de Arabia Saudí.
Los integrantes del KH-7 Epsilon Team, dakarianos de pro con 65 participaciones en conjunto, afrontan la edición 2023 añadiendo un reto más a su mochila. Su obstinación por estudiar la viabilidad de competir en la carrera más dura del mundo utilizando medios no contaminantes les ha llevado a apostar por el hidrógeno, paso que han dado con la ayuda de EVARM, compañía especializada en la conversión de mecánicas de vehículos profesionales a combustibles alternativos. El MAN 6×6 del equipo, uno de los pesos pesados del Dakar, con una tara de 11.500 kg, estará animado por una mecánica potenciada hasta los 800 CV. Por sus seis cilindros en línea combustionarán una combinación de diésel e hidrógeno, este último inyectado desde dos tanques que acumulan un total de 420 litros y que se rellenarán al fin de cada etapa utilizando una hidrogenera móvil.
La carrera más dura del mundo ejercerá, pues, de perfecto campo de pruebas para este ambicioso reto, que aportará nuevos y decisivos aprendizajes en materia de desarrollo de sistemas y de logística del combustible de cara a futuros usos en los camiones de serie. No en vano, si la experiencia 2023 se cierra de forma satisfactoria, el KH-7 Epsilon Team pretende convertir el hidrógeno en el combustible principal de su vehículo de cara a la edición de 2024.
La iniciativa del KH-7 Epsilon Team nace de la innovación y la preocupación por la sostenibilidad. Jordi Juvanteny, piloto, comentaba al respecto: “Estamos en la segunda etapa de este proyecto, que iniciamos el año pasado con el uso de ecocombustibles. En 2023 hemos relevado el GLP por hidrógeno, que es completamente limpio y no deja huella en la atmósfera. Ésta es nuestra forma de devolverle al Dakar parte de lo mucho que nos ha aportado. Además, el planeta nos reclama cambios y no podemos esperar una respuesta exclusivamente institucional. Debemos ponernos en marcha entre todos y desde ya mismo. Nuestro equipo pretende hacer cosas grandes e innovadoras, y de este modo aportar un granito de arena al planeta, que nos lo pide”.
En la edición 2022, Juvanteny, Ballbé y Fina Román (relevo de Criado, baja a última hora por Covid-19) ya dieron el primer paso convirtiendo su motor para poder utilizar HVO –gasóleo sintético elaborado a partir de aceite reciclado– combinado con GLP, de modo que redujo notablemente sus emisiones. En 2023 quieren dar un nuevo paso adelante con el uso de hidrógeno como fuente de energía completamente limpia.
Xavier Ribas, ingeniero técnico industrial y director de EVARM comenta: “La transformación de un motor obliga a incorporar sistemas electrónicos, hidráulicos y de gestión para permitir la combustión del diésel con el H2 de forma segura y sin perder prestaciones. En carrera, tendremos un ahorro entre el 40 y el 50 por ciento de gasóleo”.
José Luís Criado, copiloto del KH-7 Epsilon Team, que en 2023 afrontará su 32ª participación dakariana, apunta: “Ser pioneros me provoca una especial satisfacción. La vida son retos e ilusiones, y creemos que nuestra experiencia puede contribuir a la innovación en el sector del transporte de mercancías, que tiene un gran impacto en materia de emisiones y que no puede beneficiarse de forma tan clara de nuevas energías como la eléctrica”. Jordi Ballbé, que acompañará al equipo como navegante por segunda vez, añade: “No sólo seremos el único camión, sino el único vehículo del Dakar que confía en el hidrógeno como combustible. Nuestro objetivo es optimizar su uso para ahorrar la máxima cantidad de gasóleo. Ejercer de banco de pruebas al tiempo que se afrontan las dificultades propias de la carrera supone un reto mayúsculo.”
En su 31ª aparición en el Dakar, Jordi Juvanteny subraya la importancia de tener, año a año, un nuevo desafío: “A pesar de llevar tantas ediciones a cuestas, todavía nos quedan retos. Cada edición supone una motivación nueva, porque la carrera cambia, su recorrido es secreto y no se conoce hasta 15 minutos antes de la salida de cada etapa. Así que acabar, en sí, supone un hito mayúsculo, y por supuesto también hacerlo en la mejor posición posible. Esta carrera es nuestra vida”, concluye el piloto del equipo, que celebrará su 27ª edición junto a José Luís Criado, con quien ha logrado 16 triunfos del Trofeo 6×6 y cuatro títulos de la categoría de Producción. En la pasada edición, pero sin la participación de Criado, acabó junto a Fina Román y a Jordi Ballbé en 20ª posición y como primer equipo español de la clasificación, algo que la tripulación –ahora sí con Criado en lugar de Román– tratará de superar.
El Dakar 2023 arrancará el 31 de diciembre y concluirá el 15 de enero, tras 14 duras etapas en el desierto, una prólogo y una jornada de descanso.