La vitrocerámica es uno de los electrodomésticos más utilizado y práctico de la cocina. Todo un todoterreno que tiene que soportar un uso intensivo y continuado, con el añadido de que a menudo no sabemos cuidarla como realmente merece. Las manchas y la grasa incrustada, las ralladuras de ollas, cazuelas y sartenes y la pérdida constante de brillo son las huellas más evidentes de una limpieza incorrecta de nuestra vitrocerámica, así como indicios de cierta dejadez.
Si este es tu caso, no te preocupes. KH-7 pone una solución eficaz al alcance de tu mano, KH-7 Vitro Cerámica. Un excelente aliado para conseguir eliminar la suciedad de la vitrocerámica de manera rápida y completa, además de evitar que se raye. ¡Te descubrimos cómo usarlo y consejos para cuidar tu vitro sin apenas darte cuenta!
KH-7 Vitro Cerámica no puede faltar entre los productos básicos de limpieza para tu hogar. Un artículo de limpieza en formato crema que elimina de manera fácil y rápida incluso las incrustaciones de grasa más difíciles de quitar.
El poder desengrasante de las partículas KH-7 Vitro Cerámica y una fórmula elaborada con la tecnología más avanzada convierten este producto de KH-7 en uno de los mejores recursos para mantener la vitrocerámica como el primer día.
Para limpiar tu vitrocerámica con KH-7 Vitro Cerámica solo has de seguir estos sencillos pasos:
1Compra tu KH-7 Vitro Cerámica en tu tienda o supermercado de confianza. La compra de un producto específico para la limpieza y cuidado de vitrocerámicas es fundamental para alargar su vida útil y mantener un aspecto impecable.
2Antes de proceder a limpiar la vitrocerámica, asegúrate de que el bote está bien cerrado y agítalo bien.
3Aplica tu KH-7 Vitro Cerámica cuando la placa esté completamente fría y ve frotando suavemente el producto con un paño seco o papel de cocina.
4En las zonas en las que la suciedad se resista será necesario recurrir a una rasqueta. Pásala siempre de forma suave, sin hacer fuerza en exceso. La crema ayuda a desprender y ablandar las incrustaciones, siendo necesario solo una ligera presión para arrastrar toda la suciedad con la rasqueta.
5Dejamos pasar unos minutos para que actúe bien la crema, procederemos a aclarar la vitrocerámica con un paño suave y algo humedecido.
6Por último, secaremos la superficie con un paño seco e igualmente suave. En esta última fase aprovecharemos para sacar brillo a nuestra vitro y dejarla como nueva.
Ahora que ya sabes cómo limpiar tu vitrocerámica para dejarla impoluta, vamos a ofrecerte una serie de consejos para su cuidado.
Utilizar siempre los productos y útiles adecuados. Hacerse con una buena rasqueta y evitar el uso de productos abrasivos sobre la superficie cerámica es una de las prácticas básicas para evitar que la vitrocerámica se deteriore.
No usar estropajos. Aunque algunos estropajos son suaves, la mayoría pueden terminar por rayar la superficie de la vitrocerámica. En mejor recurrir a bayetas suaves o papel de cocina.
Retira las manchas inmediatamente. Si se te ha caído líquido o derramado azúcar o cualquier otro producto que pueda quedarse pegado e incrustado sobre la vitrocerámica, retíralo cuanto antes ya que es más sencillo eliminar esos restos cuando aún no se han endurecido.
Sé constante en la limpieza de tu vitrocerámica.
Usa un menaje de cocina adecuado para vitrocerámicas.
Además de limpiar con KH-7 Vitro Cerámica, también puedes optimizar la limpieza con productos naturales como el vinagre, unas gotas de zumo de limón o un cubito de hielo para ayudar a desincrustar las manchas más difíciles.