¿Sabías que fregar los platos con el grifo abierto supone un consumo de unos 100 litros de agua?
Mantén el grifo cerrado mientras enjabones los platos y cubiertos y ábrelo solo para enjuagarlos. Por cada minuto con el grifo abierto se pierden entre 5 y 10 litros de agua. Pruébalo y ahorra de forma fácil.